Soy Álvaro Zapata, joven de la parroquia de San Leandro. Este año he participado con las Misioneras Oblatas en la misión que realizan todos los años en Perú. Ha sido un mes repleto de actividades, charlas, formaciones, risas, eucaristías y muchos encuentros con Dios. Las labores que hemos realizado han variado mucho, desde dar charlas de afectividad sexual, de redes sociales, de comunicación padres-hijos, dar catequesis para primeras comuniones, hacer visitas a las casas del pueblo, campamentos y organizar juegos por la tarde con los más pequeños del pueblo. Ha sido una experiencia preciosa en la que en cada actividad veía a Dios en el rostro, de un niño, un adolescente o en la cara de un adulto que nos recibía en su casa con todo lo que tenía y más. Hemos convivido un grupo de 5 misioneros y 3 oblatas. Dos de las misioneras venían de las comunidades oblatas de Argentina, lo que ha resultado un encuentro muy enriquecedor de conocimiento de otras realidades oblatas. Además, junto a...
un crimen en toda regla ,como no,y crimen también la matanza sistemática de españoles llevada a cabo por el bando nacional durante la guerra y postguerra....con el aval y consentimiento de la iglesia católica,¿perdonaron estos mártires a sus verdugos ?? posiblemente si pero ya los vengaron con creces sus camaradas y compañeros con todo aquel que no pensase tal y como dictaba el nacional-catolicismo.
ResponderEliminarbasta ya de hipocresía