La Jornada Mundial de la Juventud desde los Jóvenes Oblatos
Ya están de vuelta en España los Jóvenes Oblatos que han participado en las Jornadas de la Juventud Oblata en Breslavia y en la Jornada Mundial de la Juventud en Cracovia.
Han vuelto cargados de experiencias, de interrogantes y de ganas de dar pasos en su vida personal y cristiana... y un poco cansados físicamente, que todo ha sido muy intenso.
En primer lugar Breslavia, donde la Provincia Oblata de Polonia acogió a los 1400 jóvenes cercanos a los oblatos a lo largo del mundo entero. Allí el encuentro con el Carisma Oblato de mano del Superior General, de oblatos de todas las partes del mundo y de los propios jóvenes que compartían la alegría de vivir el Evangelio y la Misión, fue una gran interpelación.
Después, Cracovia. Los primeros días fueron de espera del Santo Padre, el Papa Francisco, desde las catequesis con obispos de habla hispana (los Jóvenes Oblatos escucharon las catequesis del Cardenal de Panamá, del obispo de Gran Canarias y de un obispo de una diócesis de Colombia), la misa de apertura de la Jornada Mundial a cargo del arzobispo de Cracovia y diversos momentos de compartir. Los últimos días fueron para buscar y escuchar al Papa Francisco: en la bienvenida, el Via Crucis, la Vigilia y la Eucaristía conclusiva.
Miles de experiencias, cientos de momentos y de anécdotas, lluvia, calor, cientos de miles de personas, la hospitalidad del pueblo polaco, las sorprendentes medidas de seguridad y el exquisito comportamiento de la policía y el ejercito del país anfitrión... y mucho más que esperamos que los propios protagonistas de la aventura de la JMJ, los jóvenes, quieran compartir con Nosotros OMI.
Escenario en Breslavia en las Jornadas de la Juventud Oblata
Vuelta pasada por agua de la Vigilia y Misa con el Papa en Cracovia
Nuestros Jóvenes Oblatos peregrinos de la JMJ casados 3 días antes
Una de las eucaristías en Breslavia en la bella iglesia de los oblatos
Nuestro Superior General en el saque de honor del partido
oblatos contra juventud oblata
Las fotografías son cortesía de nuestro Joven Oblato Sergio Ramos, gracias.
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