Oración vocacional: mes de Junio

San Eugenio de Mazenod, un hombre que supo ser fiel a la voz y al don que el Espíritu Santo le hizo, y que convirtió ese don en un regalo para la Iglesia. Muchos hombres, a lo largo de estos últimos 200 años, han seguido las huellas de San Eugenio, contribuyendo a “hacer crecer” el carisma Oblato.

Hoy, ¿merece la pena que otros hombres continúen esa historia?



Comentarios

Entradas populares de este blog

Con las Misioneras Oblatas en Perú

Festival de la Fe

Alabado sea Jesucristo y María Inmaculada.