Saludos desde Senegal


Después de una semana por estas tierras subsaharianas, quiero compartir con vosotros un poco de lo que está suponiendo para mí este viaje a Senegal, acompañando al P. Provincial en su visita canónica y al P. Adriano como procurador de la misión.
La primera palabra que viene a mi mente es: ACOGIDA.
Acogida en primer lugar por parte del superior de la misión, P. Bruno, y de los oblatos que trabajan en esta delegación. Quiero resaltar este aspecto, teniendo en cuenta que es la primera vez que visitamos esta delegación como nueva Provincia Mediterránea, y que mis dificultades con el francés son más que evidentes. Pero acogida también por parte de la gente, especialmente por parte de las comunidades cristianas. El saludo forma parte de esta cultura, un saludo a todo el mundo, que hemos perdido en nuestro país. Cuando vamos en el coche, en cualquier parte, todo el mundo nos mira y nos saluda.
La segunda palabra es: FE.
Estoy conociendo comunidades cristianas vivas, con un gran espíritu de fe, teniendo en cuenta, que los cristianos aquí son minoría. Se habla de un cinco por ciento de cristianos, en un mundo mayoritariamente musulmán. Sin embargo, el número de cristianos crece poco a poco como el grano de mostaza. Una pequeña comunidad pero bien organizada, llena del Espíritu, que da multitud de frutos vocacionales. Una delegación que pronto será provincia. Hemos visitado las tres casas de Dakar, la casa provincial, en Mermoz, la parroquia de Parcelles  y la casa del prenoviciado y centro juvenil, en Front de Terre, con más de veinte jóvenes.
Después marchamos al interior del país, a visitar a las comunidades de Ngueniene y Koungheul, en la cual nos encontramos ahora, aprovechando la conexión de internet.
Sencillamente os envío alguna de las fotos sacadas, que hablan más que las palabras.

Un saludo de parte del P. Provincial y el P. Adriano a todos los lectores de nosotros omi








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