Dos años después del último encuentro de verano, nuestros amigos de Amistad y Colaboración Oblata (AMYCO), retomaron la buena costumbre de reunirse en verano para seguir estrechando lazos y mantener vivo el recuerdo de sus años de juniorado. Riaño fue el lugar escogido, a la sombra del pico Yordas y sobre el pantano en el que descansan tantos pequeños pueblos en los que nacieron oblatos que han evangelizado por todo el mundo.
Este año, además, contamos con la visita de Mons. Mario León Dorado, prefecto apostólico del Sáhara, que compartió este hermoso y soleado día con las familias que colaboran en proyectos de esta Misión. Los oblatos que la componen están muy agradecidos y el P. Mario nos puso al día de cómo está la situación de tantos hermanos y hermanas que tenemos en nuestro recuerdo.
El encuentro terminó con la tradicional comida, en la que juntos compartimos lo que somos y lo que tenemos, como dicen las Constituciones y Reglas oblatas.
Damos gracias a Dios por esta ocasión de encuentro de estos miembros de la familia oblata, que forman parte de la historia viva de nuestra Provincia y que desean seguir unidos a nuestra misión en favor de los más abandonados, como soñaba san Eugenio de Mazenod.
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