Los jóvenes y Europa (22/10/2010 - Francia)
LEIDO en www.omiworld.org
Una treintena de jóvenes adultos vinculados a los Oblatos se han reunido este verano en Marino Italia, provenían de seis países de Europa. Laetitia, Herman y Laurent representaban a Francia.
Nuestro objetivo era crear una red europea entre jóvenes que viven del carisma de San Eugenio de Mazenod, en relación a la cultura particular de cada uno.
Hicieron del compartir práctico de la vida común una realidad, no importando tanto el idioma que fuera hablado. El intercambio misionero era posible en grupos lingüísticos. Los delegados presentaron, por turnos, la situación de los jóvenes de su país, así como la misión vivida por ellos mismos y con los Oblatos en su cultura.
Los jóvenes de Ucrania mencionaron la reconstrucción de los lugares y grupos en su país; los de Polonia presentaron los festivales de su movimiento espiritual “Niniwa”; los Italianos hablaron del movimiento “Costruire”; los Españoles de sus grupos parroquiales, los Irlandeses del servicio a los enfermos en Lurdes y de la misión en Sudáfrica, y los Franceses “de la Escuela de la Misión”.
Todos los días, un tema coloreaba cada contribución. Tuvimos tiempo para la convivencia. Un tiempo de reflexión personal, además de un rato para la oración en común y un tiempo para compartir. Un día se hizo una visita a Roma, para dar una vuelta por la tumba de San Pedro y la casa general de los Oblatos, así nuestros jóvenes pudieron vivir una dimensión universal, aún más amplia que el congreso europeo.
El encuentro entusiasmó a los participantes: se siguen comunicando mutuamente por MSN y por Skype, a la espera de encontrarse en Málaga y Madrid para las JMJ de agosto de 2011. (Vincent GRUBER en Audacieux pour l’évangile, octubre de 2010).
Nuestro objetivo era crear una red europea entre jóvenes que viven del carisma de San Eugenio de Mazenod, en relación a la cultura particular de cada uno.
Hicieron del compartir práctico de la vida común una realidad, no importando tanto el idioma que fuera hablado. El intercambio misionero era posible en grupos lingüísticos. Los delegados presentaron, por turnos, la situación de los jóvenes de su país, así como la misión vivida por ellos mismos y con los Oblatos en su cultura.
Los jóvenes de Ucrania mencionaron la reconstrucción de los lugares y grupos en su país; los de Polonia presentaron los festivales de su movimiento espiritual “Niniwa”; los Italianos hablaron del movimiento “Costruire”; los Españoles de sus grupos parroquiales, los Irlandeses del servicio a los enfermos en Lurdes y de la misión en Sudáfrica, y los Franceses “de la Escuela de la Misión”.
Todos los días, un tema coloreaba cada contribución. Tuvimos tiempo para la convivencia. Un tiempo de reflexión personal, además de un rato para la oración en común y un tiempo para compartir. Un día se hizo una visita a Roma, para dar una vuelta por la tumba de San Pedro y la casa general de los Oblatos, así nuestros jóvenes pudieron vivir una dimensión universal, aún más amplia que el congreso europeo.
El encuentro entusiasmó a los participantes: se siguen comunicando mutuamente por MSN y por Skype, a la espera de encontrarse en Málaga y Madrid para las JMJ de agosto de 2011. (Vincent GRUBER en Audacieux pour l’évangile, octubre de 2010).
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