El pasado día 30 de Enero, El P. Tino y el escolástico Antonio, evangelizaron en las aulas del instituto de Tesorillo.
La pregunta que abría, con aire provocador, el encuentro con los jóvenes era: "¿Qué esperas?".
Detrás de una vida corriente hay expectativas que se anhela cumplir: Tener novia/o; encontrar determinado trabajo; formar una familia…
Los jóvenes, en cada clase, iban enumerando sus expectativas, unas más clásicas, otras más estrafalarias.
Tras esto, intervenía Antonio, con su testimonio provocador. ¿Cabe esperar algo más? Su historia personal, una accidente de moto, sus vivencias con una comunidad oblata acogedora y exigente, ayudaron al despertar. ¡Se puede esperar algo más! Se puede esperar en Alguien, en Jesús.
La profesora de religión del centro, Concepción, nos acogió con cariño, con el deseo de repetir el encuentro.
Antonio y Tino pasaron día y medio con nosotros. Se lo agradecemos. Su trabajo y compartir fraterno fueron un estímulo para continuar la siembra, aunque el campo parezca escarchado con sal.
Me parece un estupendo trabajo, pocas veces los jóvenes tienen oportunidad de recibir una equilibrada orientación en sus institutos de educación , ciertamente ampliando sus capacidades reflexivas puedan darse una respuesta valiente sobre su verdadera vocación.
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